viernes, 18 de julio de 2014

Gota a gota se escurre el recuerdo. No quedará nada de ti...

Te vas, ya no te siento, ya no te añoro, y con tu partida me alegro enormemente, pero me dejas miedo e incertidumbre, te vas y no me apena ya, es lo que he querido desde hace mucho, pero quien sabe... Quizás una de estas noches en las que vuelva a llegar borracho por la mañana te recuerde y me salte la inspiración, como (no sé como cojones) pasaba hace un tiempo. Habrá que comprobarlo...
En este tiempo incluso yo he notado el cambio en mí, para mejor, diferente, pero mejor. No voy a verte, y es una de las grandes ventajas de estar lejos porque tampoco adoraba la idea, no vas a venir, no vas a hablarme, ni yo tampoco, no vamos a cruzarnos por casualidad, no voy a hacer nada por cambiar este estado, y se mantendrá así unos cuantos meses más, suena a luz y a vida...

Para ciertas personas puede que solo haya un tren... uno solo

Y justo cuando creía que te había encontrado... bum! de buenas a primeras me voy del país, y tu también, pero no al mismo que yo, y aunque no paremos de hablar hasta ahora creía que eras tú, que de verdad te había encontrado, pero ahora en la soledad de mi habitación donde me fumo el sabor de las piñas y puedo pasar casi 16 horas seguidas encerrado escuchando canciones, escuchando piano... parece que ya no tienes tanto poder en mí. Quizás fue la enorme impresión de saber que existía alguien así, quizás sea la distancia que nos separa, quizás sea mi maldita tontuna por no captar indirectas y no saber ni como me ves tu a mí. Puede que las fotos que me mandas casi cada día ayuden a que hoy te eche de menos, a pesar de tenerte a un clic de distancia, me encantaría abrazarte, y completar la noche que acabó a las 5.30 de la mañana en tu portal, o devolverte la noche que no pudimos estar juntos, con pasión abundante. Quizás en invierno, quizás en verano, en África o España o Londres o Lisboa, no importa dónde, un sólo día, una sola mirada de esos ojos cuyo color real nunca pude ver, e intentar comprender si eres tú, si soy yo, o si podemos ser los dos.
Si algún dia lees esto, esta es la banda sonora que suena ahora, y durante la mayor parte de estas 16 horas, en mi habitacion.